viernes, 25 de enero de 2013

Las Asociaciones piden pruebas de la muerte de Sor María



Muere la monja sor María Gómez Valbuena imputada en tres casos de robo de niños
Las asociaciones de niños robados piden pruebas sobre la muerte de sor María.
La muerte de la monja sor María Gómez Valbuena hace dos días, imputada en el robo de niños, y su entierro ha levantado las sospechas de las asociaciones de afectados por el robo de bebés. Su fallecimiento y entierro en un cementerio de Madrid no se ha conocido hasta hoy.
María José Esteso Poves. Redacción
24/01/13 · 19:24
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Sor María Gómez Valbuena a la salida de los juzgados de Plaza de Castilla de Madrid. / Foto: David Fernández.
La noticia de la muerte de la monja, implicada en el robo de gran número de niños robados e imputada en tres investigaciones abiertas en los juzgados de Madrid, levanta sospechas entre las asociaciones de afectados. La monja sor María Gómez Valbuena de 87 años falleció el martes y ya está enterrada, según se difundió ayer por la noche por las redes sociales y confirmaron hoy a varios medios de comunicación verbalmente religiosas del convento de las Hijas de la Caridad donde vivía la monja, en la calle Martínez Campos de Madrid. Según esas fuentes sor María murió el martes y ya está enterrada en el cementerio de San Justo en Madrid aunque de momento no se ha dado a conocer ningún documento oficial que certifique la muerte de la monja imputada.

Para Soledad Luque, de la asociación Todos los niños robados son también mis niños, es todo bastante raro. “No se nos ha mostrado ningún comunicado oficial de la muerte, solamente la confirmación del convento de las Hermanas de la Caridad en respuesta a una llamada de una televisión según se comenta en las redes". Luque explica que la noticia de la muerte de sor María Gómez Valbuena apareció anoche en un medio digital y circuló rápidamente por las redes sociales.
“Nosotros nos preguntamos por qué se ha tardado tanto en dar a conocer la información sobre esta muerte, una persona que está imputada en tres casos de niños robados. Existe bastante recelo y varias asociaciones de niños robados esta mañana estábamos contemplando la posibilidad de pedir pruebas de la muerte de la monja a través de una exhumación.“De momento esperaremos una comunicación oficial que todavía no ha llegado”, ha declarado a DIAGONAL Luque.
La portavoz de la asociación Todos los niños robados son también mis niños apunta también que: “Lo contradictorio de todo esto es que hemos tenido que ser las propias asociaciones las que alertemos a los medios de comunicación. Es muy extraño, porque el 18 de enero cuando la monja tenía que haber ido a declarar al juzgado nº 50 de Plaza de Castilla como imputada en el caso del robo de las gemelas de Purificación Betegón, se dijo que no acudía por problemas de salud, pero en ningún momento se habló de extrema gravedad. Pero después, la muerte y ese ocultismo y la celeridad con la que se le ha enterrado. No sabemos...”, reconoce Luque.
El temor de las asociaciones es que se archiven los pocos casos abiertos. "Si no hay imputada lo más probable es que se produzca un archivo provisional, aunque en el caso de María Luisa Torres la investigación ya está muy avanzada y es posible que existan más imputados en el futuro. Y el mismo riesgo corre el caso de Purificación Betegón”, dice Luque. Sin embargo, existe otro tercer caso en el que está imputada la monja y una doctora, por tanto las asociaciones creen que este tercer caso no se archivará al quedar otra imputada.

“Un jarro de agua fría”
Antonio Barroso, presidente de la asociación Anadir coincide con Luque. “Bueno nos tenemos que creer lo que nos dicen: ¿Qué hayan falsificado el certificado de defunción…? Puede ser. ¿No tenemos nosotros falsificados los certificados de nacimiento?”, explica a DIAGONAL Barroso. Para el portavoz de Anadir la noticia “ha sido un jarro de agua fría”. Dice que “las familias que habían conseguido imputarla han demandado por la vía penal y ahora el caso se archivará. Ahora les queda la vía civil por la que tendrán que pagar tasas,. Es un despropósito. Vamos a solicitar de nuevo que se abran todos los casos de niños robados que se han archivado y que se tenga en cuenta la circular del fiscal general del Estado Eduardo Torres-Dulce del 26 de diciembre sobre la no prescripción de estos delitos”.
Por su parte, Fernando Magán explica que “la muerte de la monja no es relevante para el conjunto de la investigación sobre el robo de niños”. El abogado recuerda que existe suficiente información sobre más implicados aún vivos que “actuaron de forma coordinada con la monja y que deben ser también juzgados”.
Magán fue quien llevó a las primeras denuncias en 2009 por robo de bebés de varias casos ocurridos maternidades de distintos puntos del Estado español, algunas de esas personas afectadas son hoy representantes de asociaciones de niños robados. “Son casi 100 las denuncias individuales de afectados por el robo de niños presentadas en un juzgado de Madrid que se dispersaron a otros juzgados y estamos pendientes de que la Audiencia Provincial de Madrid acumule en una única causa”, señala el abogado y concluye: “el archivo de las tres denuncias abiertas en el juzgado 47 y 50 de instrucción de Madrid contra la monja fallecida no corren peligro, porque en todo caso sería archivo temporal que se abriría con nuevas pruebas sobre otros implicados que ya sabemos existen y coinciden, además, con otros muchos casos”.

La cabecilla de la trama del robo de niños
Sor María Gómez Valbuena era la única imputada en el caso de los niños robados en Madrid. Estuvo como asistente social durante casi 20 años en el Hospital de Santa Cristina de Madrid y sobre ella recaen las denuncias muchos casos de familias afectadas.
Gómez Valbuena presumía en los años ’80 ante los medios de comunicación de haber dado en adopción a miles de niños. Hecho que también destacaba el que fue director de la Asociación Española para la Protección de la Adopción (AEPA) Enrique Guijarro, entonces fiscal jefe del Tribunal Supremo, ya fallecido, y que presidio dicha organización entre 1969 a 1982. Miembros de la AEPA han sido también llamados a declarar en los casos en los que estaba imputada la monja recién fallecida.
Gómez Valbuena engañaba a las mujeres embarazadas y les prometía ayuda. Muchas mujeres accedieron a ser ingresadas en pisos y edificios de órdenes religiosas y en el momento del parto eran dormidas y los bebés desaparecían. La monja y los médicos argumentaban a las madres que el bebé había fallecido. Sin embargo, las sospechas de muchas familias se han confirmado estos últimos años, los bebés eran robados y entregados a otras familias que los registraban como hijos naturales. En los hechos están implicada la monja sor María Gómez Valbubena. Además, participaron en estos hechos médicos, enfermeras, comadronas, notarios, abogados, conserjes de las maternidades, e incluso dueños de funerarias que sabían que se enterraban ataudes vacíos.

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